Historia[]
Hohenheim de joven.
El joven que más tarde pasaría a ser conocido como Van Hohenheim creció durante el siglo XVI en la capital del antiguo y avanzado país de Xerxes. En su juventud, fue el vigésimo tercer esclavo de un alquimista personal del rey de Xerxes y fue conocido simplemente como "23". De humilde posición, sin libertad, ningún conocimiento del mundo o incluso un nombre, la vida del joven iba a cambiar drásticamente en los años de mediados de la adolescencia cuando su amo lo eligió para un experimento alquímico particular que implicó tomar un poco de su sangre. Al limpiar el laboratorio de su amo un día, pronto después, 23 encontró el producto de este experimento - una criatura sombría sensible casi sin forma, mantenida en un matraz, que se hace llamar un homúnculo. Agradeciendo al Esclavo 23 por la sangre que le había dado la vida, el homúnculo decidió darle al joven un nombre. Aunque 23 decidió que el nombre que el homúnculo había planeado inicialmente para él - Teofrasto Bombastus Van Hohenheim - era demasiado largo para que él lo recuerde, él aceptó "Van Hohenheim" como su nombre. Pero cuando el homúnculo se dio cuenta de que, como un humilde esclavo, Van era demasiado ignorante para leer o escribir, explicó que, con el conocimiento, él sería capaz de escapar de las cadenas de la esclavitud y hacer algo de sí mismo en el ancho mundo. Como su segundo regalo, el homúnculo comenzó una tutoría con Van poco después, usando su propio conocimiento misterioso para enseñarle a leer, escribir, aritmética, ciencia y alquimia básica.
Eufórico con el nuevo sentido de orgullo que vino con su conocimiento, Van comenzó a dar lecciones a los demás esclavos, y cuando el maestro descubrió sus habilidades notables, Van declaró que, con su conocimiento de la alquimia, podía ser un activo más valioso para el maestro que un simple esclavo. Poco después, el amo de Van decidió liberarlo de la esclavitud y, en su lugar, lo tomó como su asistente. A medida que maduró como un alquimista, Van agradeció al homúnculo por darle los conocimientos necesarios para superar sus días en el peldaño más bajo de la sociedad, y expresó su esperanza de que él sería capaz de formar una familia.
Cuando Van preguntó qué haría al homúnculo feliz, simplemente respondió que le gustaría algún día poder escapar de su frasco sin morir. Poco después, Van y el homúnculo comenzarían a pasar menos tiempo juntos, cuando el conocimiento misterioso de la sombría criatura fue solicitado por el rey de Xerxes, a fin de buscar una manera de hacer al monarca inmortal. Haría falta al menos una década para que el ritual de inmortalidad planteada por el homúnculo llegara a completarse, pero cuando llegó ese día, se hizo inmediatamente evidente que el homúnculo había diseñado una especie de traición. El homúnculo orquestó la situación para que Van Hohenheim (sosteniendo el frasco) se situara inadvertidamente en el verdadero centro del círculo de transmutación que había diseñado a costa de las vidas sacrificadas durante los años de su preparación. Más de un millón de personas que vivían en Xerxes perdieron sus almas y se condensaron en el centro cuando se activó el círculo, tirando de los dos a través de la Puerta de la Verdad, haciendo que ambos cuerpos contaran con una cantidad de aproximadamente medio millón de almas cada uno. Cuando Van despertó a la mañana siguiente, se horrorizó al encontrarse en un mausoleo y el homúnculo habitando un cuerpo aparentemente humano idéntico al suyo. Al explicar la situación, el homúnculo reveló que él había sacrificado al pueblo de Xerxes con el fin de escapar de su prisión de cristal, así como dar a su pariente de sangre, Van Hohenheim, un último regalo - la vida eterna y un cuerpo que nunca envejecería. Esto dejó a Hohenheim como el último ciudadano sobreviviente de Xerxes.
Lleno de desesperación, Van huyó al este de su tierra vacía, vagando sin rumbo por el Gran Desierto y se dio cuenta de que los movimientos y gritos de angustia, de las miles de personas que se arremolinaban dentro de su alma, lo estaban volviendo loco. Al no tener un alma propia, empezó a hablar con ellos, separando las almas individuales a partir del interminable coro de gritos, hasta que se desplomó, agotado en la arena. Encontrado aún vivo por los viajeros de la nación oriental de Xing, Van Hohenheim fue llevado allí y recobró las fuerzas, mientras que llegaba a un acuerdo con cada una de las almas dentro de él, y le enseñaba los principios alquímicos al pueblo de Xing. Cuando el conocimiento alquímico de Hohenheim se combinó con la forma rudimentaria de la alquimia que se estaba estudiando en Xing, la alkahestria nació. Las personas de Xing lo llamaron entonces el "Sabio de Occidente".
No se sabe a dónde Van Hohenheim viajó después de llegar a Xing, pero después de pasar varios siglos en el extranjero, acumuló conocimientos sobre las diferentes costumbres y prácticas del mundo. Apareció más tarde en el país cada vez mayor de Amestris y se instaló durante un tiempo en un pequeño pueblo de la zona este, conocido como Resembool; presumiblemente en algún momento de la década de 1860. Allí, se convirtió en buen amigo de la gente del pueblo, sobre todo de una mujer joven con el nombre de Pinako. Décadas más tarde, Pinako presentaría a Van a una joven llamada Trisha, de quien se enamoró. En 1899 Trisha dio a luz a su hijo llamado Edward, y un año más tarde a Alphonse.
Van empezó a temer la posibilidad de tener que ver a su nueva familia envejecer y morir, como lo había visto pasar a tantos otros en los últimos siglos. Creyéndose un monstruo, empezó a temer que tocar a sus hijos les daría su maldición, pero Trisha se dio cuenta de su malestar y decidió contratar a un fotógrafo para tomar un retrato de los cuatro juntos. Decidió, entonces encontrar una manera de acabar con su inmortalidad y envejecer y morir junto a su amada Trisha, pero también temía el fracaso, y tener que ver morir a su familia antes que él.
Expresión triste de Hohenheim en la foto familiar.
Desafortunadamente, al estudiar atentamente innumerables textos alquímicos, a fin de encontrar una manera de revertir el efecto de lo que el homúnculo había hecho con él, Van hizo un sorprendente y aterrador descubrimiento: la propia nación de Amestris fue construida y diseñada desde cero para ser un país mucho más grande y repetir la tragedia que había acontecido en Xerxes - un gigantesco círculo de transmutación con el propósito de convertir a todos los habitantes del país en una Piedra Filosofal. Al darse cuenta de que sólo el homúnculo podría ser responsable de este complot, Van decidió que iba a detenerlo por el bien de todos sus queridos amigos y su amada familia. Después de explicarle a Trisha que se iba, y prometiendo que iban a morir juntos, Van Hohenheim partió de casa y de Resembool en 1904.
Después de viajar durante una década (presumiblemente investigando los métodos del homúnculo) Van Hohenheim reapareció en Central en 1914, donde se encontró con una alquimista llamada Izumi Curtis, con quien conversó sobre la Piedra Filosofal y reveló que su "sueño de toda la vida" estaba a punto de hacerse realidad.
Ed se reencuentra con su padre después de diez años.
Van Hohenheim se introduce primero en la historia en el capítulo 40, cuando regresa a Resembool después de diez años para descubrir que su casa se ha quemado misteriosamente. Él, confusamente, va a la casa de Pinako para preguntar qué había pasado, y su vieja amiga le cuenta lo que sucedió con su familia después de su partida: Trisha había muerto de una enfermedad; Edward y Alphonse habían intentado una Transmutación Humana para resucitarla, lo que provocó un Rebote que resultó en que Al perdiera su cuerpo y Edward perdiera un brazo y una pierna. Poco después, Van va a visitar la tumba de Trisha y se enfrenta a un Edward adolescente, quien está furioso de encontrar a su padre, perdido desde hace mucho tiempo, allí.
Antes de irse, él advierte a Pinako Rockbell que salga del país por su seguridad, después se marcha de Resembool con un viejo retrato de su familia en su chaqueta. Más tarde reaparece y le revela a Izumi y Sig Curtis que él se considera a sí mismo como una "piedra filosofal en forma humana". Después recolocó los órganos internos devastados de Izumi en una disposición más favorable, simplemente poniendo la mano en su abdomen, a pesar de que no fue capaz de restaurar los órganos que perdió. Él le dice que ella tiene mucho que hacer aún en su vida, y la anima a seguir adelante.
Hohenheim luego pasa a Lior, donde conoce a Rose. Ella y el viejo comerciante lo llevan a un depósito subterráneo, donde se cruza con el agua envenenada, formando un camino de piedra bajo sus pies mientras camina. Con el tiempo, entra en el círculo de transmutación gigante que está bajo Amestris, y tiene una corta batalla y conversación con Orgullo. Él le dice al homúnculo que le diga a Padre que "Número 23" viene a verlo. Hohenheim se encuentra con Al por primera vez en doce años en el capítulo 80, y tienen una charla honesta en el que explica todo sobre la situación actual a Al.
En el capítulo 85, Hohenheim se reencuentra con Edward de nuevo. Hohenheim le dice a Ed la historia de su vida temprana. Él, secamente pregunta si Ed quiere usarlo para recuperar sus cuerpos perdidos, pero Ed se niega a gritos, después de haber refutado el uso de una Piedra Filosofal desde que se enteró de sus ingredientes principales. Antes de salir, Edward le dice las últimas palabras de Trisha a Hohenheim, haciéndole llorar, lo que sorprende a Ed, quien erróneamente se había convencido a sí mismo de que a Hohenheim no le importaba su familia. En el capítulo 88, Hohenheim sella a Al y Orgullo (Selim Bradley) en una prisión de tierra sin luz, por lo que Orgullo ya no sería capaz de hacer daño. Esto enfurece a Edward, pero Hohenheim le explica que este era el plan de Alphonse.
Después de la lucha contra Orgullo, Hohenheim se convierte en el líder de facto de la expedición para derrotar a Padre. Menciona un plan para contrarrestar la activación del círculo de transmutación a nivel nacional de Padre, pero dice que prefiere evitar su activación en primer lugar. Al entrar en la guarida subterránea de Padre, él organiza al grupo en dos equipos y se va junto a Lan Fan, a quien más tarde le permite ir por su cuenta en busca de Ling Yao mientras él alcanza a Padre. Saluda a su "amigo del frasco", afirmando que "no hay necesidad de un gran grupo para castigar a un niño que se porta mal".
Después de esquivar algunos ataques, es apuñalado por Padre, quien absorbe una parte de su piedra, pero las almas inquietas que la componen (con quienes Hohenheim logró llegar a un acuerdo) destruyen el contenedor similar a la forma humana de Padre desde el interior. Sin embargo, la forma de homúnculo de Padre, que ahora tiene la capacidad de existir físicamente sin un recipiente, deja a Hohenheim en una mala situación.
Hohenheim le dice a Edward, Izumi y Al que Padre había intentado inicialmente absorber la totalidad de sus Piedras Filosofales, pero descubrió que eso lo habría matado. Sin embargo, debido a que Hohenheim había logrado comunicarse y entender a las almas de la piedra (que era algo que Padre no podía hacer), logró sobrevivir al incidente y, en cambio, su cabeza y sus piernas sobresalían del cuerpo del homúnculo (el resto de su cuerpo estaba dentro pero no separado). Padre puede entonces empujar a Hohenheim dentro de su cuerpo, pero Hohenheim también puede resistir y volver a salir con la cabeza sobresalida, que es lo que ha hecho para advertir a May acerca de los poderes de Padre. Luego de que Codicia apareciera y atacara a Padre, fallando en su intento de matarlo, Hohenheim se libera de su cuerpo, aunque aún está en manos Padre.
Una vez Padre reúne a Hohenheim y los otros como sacrificios para abrir la puerta, a estos les aparecen grandes ojos rodeados de sombras en sus torsos. Como Padre tiene éxito en la apertura de la puerta, Hohenheim, Izumi, Roy, Riza, May, Codicia/Ling, Orgullo, Ira, Cicatriz, Al y Ed son los únicos que quedan con vida, mientras que todos los ciudadanos de Amestris están muertos.
Padre se ve entonces en una niebla de humo, ya que explica que con el fin de contener a Dios dentro de sí mismo, requiere una enorme cantidad de energía. Ahora tanto ellos como Dios residen dentro de él. Una vez el humo se disipa, Padre ha ganado un nuevo cuerpo que se asemeja al de su original más joven.
Afirmando que la alquimia ha dejado de ser útil, lanza una explosión de energía hacia el grupo. Hohenheim, sin embargo, se opone con una especie de escudo alquímico, y exhorta a las almas de la piedra para que le ayudaran. Al ver que su ataque actual es insuficiente, Padre evoca un sol en miniatura en la palma de su mano para acabar con sus sacrificios humanos. Pero Hohenheim entonces revela su propio plan; trazó la trayectoria de la sombra de la luna usando el eclipse solar como círculo para la transmutación y usando la ubicación exacta de cada uno de los puntos en el círculo de cinco puntos que se utiliza para crear la Piedra Filosofal como eje central para su activación. Luego se aventuró en todo Amestris, colocando los fragmentos de la Piedra Filosofal en puntos específicos para crear un Círculo de Umbral para contrarrestar la transmutación a nivel nacional.
Las almas de los fragmentos que estaban esparcidos por toda la tierra se activan y retiran de Padre todas las almas de los habitantes de Amestris contenidas en él antes de la activación del círculo de transmutación a nivel nacional, regresando todas las almas de los ciudadanos de Amestris a sus cuerpos.
Padre ahora dedica la mayor parte de su poder para contener a Dios, ya que se había debilitado considerablemente en cuanto a sus capacidades ofensivas. Hohenheim y May son los únicos alquimistas del grupo inmunes a la interferencia de Padre, y él se defiende de los ataques de Padre drenando muchas vidas de la Piedra Filosofal, mientras que May mantiene el suelo debajo de ellos a partir de la fragmentación. Por desgracia para Padre, sin embargo, un grupo de ishvalanos activan un círculo que anularía los efectos de restricción que puso sobre Amestris en lo que la alquimia respecta, lo que permite a los otros alquimistas atacar a Padre.
Después de que Ed rematase a Padre, Hohenheim estoicamente ofrece su propia vida restante como el precio para traer de vuelta a Al, pero parece sorprendido cuando Edward reprende apasionadamente la idea. Al ser cuestionado por qué iba a sacrificar voluntariamente su vida, él simplemente responde que es porque él es su padre. Él explica que no se trata de la necesidad o propósito, sino porque son sus hijos y quiere que sean felices. También dice que fue en parte culpa suya que los hermanos trataran de traer de vuelta a Trisha, porque él no estaba allí para ellos cuando lo necesitaron y se disculpa. Sin embargo, Ed, entre lágrimas, lo regaña por sugerir la idea, pero al mismo tiempo, aceptándolo como su padre por primera vez en muchos años.
Después de que Ed tiene éxito en traer a Alphonse en su cuerpo humano, Hohenheim finalmente llega a saludar a su hijo menor una vez más, y Al se maravilla ante el calor que siente cuando Hohenheim toma su mano. Sin embargo, él se aleja cuando otros se agolpan alrededor de los hermanos Elric, finalmente para mendigar dinero para el tren.
Muerte de Hohenheim Audio Latino
Finalmente en paz, Hohenheim al final del manga es visto en Resembool. Ha agotado todas sus almas en la batalla final y su muerte es inminente. Pinako lo encuentra de rodillas delante de la tumba de Trisha, sólo para descubrir que había muerto en esa posición con una sonrisa de satisfacción en su rostro. Sus últimos pensamientos contemplan que él no tenía un significado en la vida hasta que Trisha y sus hijos entraron en ella. Pero ahora, no quería morir del todo y quedarse con su familia restante, y sus últimos pensamientos antes de la muerte estaban con ellos. Varios años después, su tumba fue vista en una foto junto a Trisha. Fue el último ciudadano de Xerxes en morir. Más tarde, él y Trisha se convirtieron en abuelos póstumos de los niños de Edward y Winry, junto con los Rockbell.